Santo Domingo de la Calzada, pan vino y carne asada

Por mala fortuna Burgos está en fiestas del cupido y me toca atravesar por medio del recinto ferial, musica, ruidos … Tenía miedo de que mis equinos se asustarán y provocarán algún percance, pero por suerte atravesamos Burgos sin problemas.

Esa noche mi yegua Rebeca se metió en una zanja y no podía salir. Tras mucho esfuerzo, yo solo conseguí sacarla, pero se la veía cansada y opte por llamar al veterinario, que me aconsejó reposo.  Organicé su traslado a un centro hípico de la zona y decidí dejarla allí hasta su recuperación.

Entre tanto,  proseguí camino. Dirección a San Juan de Ortega, me pilló una tormenta, que luego me dijeron que dejó 50 litros. Creo que me cayó toda a mi: Viento, aire,agua y granizo, porque llegué al albergue de Belorado empapado. Me dieron ropa seca y aposento que agradecí. Ese día fue uno de los más duros que he pasado en mi vida, no se lo deseo a nadie, no se veía nada, andaba por ríos de agua que la montaña vomitaba, menos mal que no se desbocó ni Ray ni mi mulo Rodolfo. 

Al día siguiente en el camino pude secar algo de ropa. Llegué a Atapuerca, aposentándome en albergue, y sigue camino a Vilafranca de Oca, de allí  Espinosa del Camino, donde decido esperar a mi yegua Rebeca, ya recuperada de su cansancio. Una vez reunida  toda la familia, proseguimos hacia Redecilla del Camino y Azofra, que nos acoge para descansar.

Siguiente etapa, Navarrete. Ya estamos en la Rioja, teniendo que pernoctar en el pantano de Grajera, donde a media noche el mulo empezó a rebuznar, por lo que salte de la tienda, sin ver un carajo, para ver qué pasaba. Enseguida  vi que faltaban Ray y Rebeca, que se habían ido de fiesta y no se habían llevado al mulo. Ray se había sacado la cabezada y Rebeca, que siempre está a su lado, se fue con él. Llamé a la policía, que en unos minutos fueron de batida por los alrededores del pantano, sin éxito, pero hablando con ellos, iban enfocando sus focos y los encontramos a  pocos metros, pero al no verlos, pase unos momentos de nervios, mi agradecimiento a los policías, que se portaron  genial. Bueno, otra noche sin dormir!

Optó por levantar el campamento y a las 7 de la mañana ya estamos en marcha dirección a Logroño que logró atravesar a través de su puente romano para salvar el río Ebro. Hago las fotos de rigor y sigo pista, dejando el camino francés para coger el camino Jacobeo del Ebro, o camino catalán, que me llevará a Zaragoza, os sigo contando....

Ah! Ya llevo 104 jornadas y estamos a 26 de junio. Recordaros que salí de San José, en Almería, el pasado 12 de Marzo.